Cuando eres tu la que decides sobre el bien o el mal, o la que decide si algo se arregla o no, te das cuenta que llevas mas peso en tu espalda del que creíste jamas. Nunca pensé que podría ser dueña de mi propio destino, pero creo que lo he llegado a conseguir. Soy todo lo que un día quise ser, ni peor ni mejor, solo yo. Muchos piensan que soy reservada y por ello he conseguido todo lo que tengo, y si, aunque me duela reconocerlo, es por ello por lo que estoy así. En mi opinión, una persona solo es capaz de conocerse a sí misma en una total paz interior y con un exterior tormentoso, viendo mas allá del mundo que la rodea y controlando todo lo que le pasa por la cabeza, asimilarlo y darle la solución mas conveniente. Y aveces, ser tan tuya solo trae problemas. Y el mayor problema tiene el nombre de soledad. Es triste, pero es un hecho. Duro y difícil de sobrellevar, pero es el único que te ayuda a madurar. Es muy complicado comprender lo, e incluso a muchas personas les asusta verse so