Tiempo.

El tiempo se detiene cuando tu quieres que suceda, porque aunque creamos que las semanas, días, horas, minutos o incluso segundos no dejan de correr, en realidad es nuestro propio tiempo el que se para cuando nosotros mismo lo decidimos. Paralo cuando necesitas salir del tiempo del mundo, para meterte en el tuyo, paralo cuando quieras ser tu misma y no puedas, o simplemente paralo cuando ya no aguantes mas con este tormento que te come por dentro. Decide tu tiempo, y que el tiempo no te decida a ti.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El ayer.

Siglo XVII